VISITA A ZARAGOZA EN FIESTAS DEL PILAR

Se acabó lo bueno. Me han confiscado la cámara de video y he me ha tocado comprar una caja de galletas de canela para compensar la que me zampé el otro día. Además había prometido a mi dueño que pondría alguna foto del fin de semana de las fiestas del Pilar. Así que aquí estoy.

Hace dos fines de semana, ya sabéis que fui a esa fantástica feria de “Clickània” y como me compraron churros, pues justo salir de ahí ya pusimos rumbo directo hacia Zaragoza. Total que a la hora de comer ya estábamos ahí. Como no hicimos ninguna parada, lo primero que hice al llegar fue hacer pipí, y ya fuimos al McDonalds a comer. Ya se lo que pensáis, que después de comer los churros no debería tener hambre, pero la verdad era que si, estaba hambriento.
Ya para descansar, esa tarde, después de una buena siesta, fuimos al cine. Allí vimos “REC2”. Que miedo que pasé. Menos mal, que siempre me puedo poner en el regazo de mis dueños, allí estoy a salvo de todo. Bueno de todo, todo no, siempre me cae alguna palomita encima (cosa de la que no me quejo.... jeje, digamos que esas palomitas no llegan a caer al suelo, ya me entendéis). Eso si, es imprescindible, que para disfrutar completamente la película veáis “REC”.
Bueno, al día siguiente, entre muchas de las otras actividades, realizamos una visita turística por Zaragoza. Y como no, fuimos a ver a la Pilarica. ¡¡¡Que plaza tan grande!!! ¡¡¡Y cuanta gente !!!. Habían montando una estructura enorme, que se utiliza el día siguiente, para poner todas la flores que traen las personas y así confeccionar el manto de flores de la Virgen del Pilar.
Estuvimos un rato por ahí, haciendo fotos, visitando el interior de la Basílica, también visitamos La Seo, preciosa por dentro y para mi más bonita que la propia basílica del Pilar.
La verdad como decía, estaba todo lleno de gente, por todas partes gente, gente y gente. Al final me encapriché de un cachirulo, y no paré de poner caricas (se me pegan expresiones mañas, jejeje) hasta que uno de mis dueños me lo compró.También visitamos un mercado de artesanía y alimentación artesanal. Un pequeño vermouth, y ya dimos por acabada la visita al centro.
Me lo pasé muy bien, y no me importaría volver a visitarlo, pero con mucha menos gente, pensad que soy pequeño, y siempre voy con el miedo que me pisen o aplasten. No pude disfrutar bien la visita. A parte, me explicaron, que muy cerca de la Basílica del Pilar, hay un restaurante chino donde se come muy bien, y tendré que probarlo, ¿no?.
Un besito a todos!
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