IMPROVISANDO PARA COMER.

Este mediodía vuelvo a estar solo, así que tengo que prepararme algo para comer yo, tendré que improvisar algo rápido porque no tenía nada preparado.

Es un rollo, me gusta mucho cocinar, pero prefiero hacerlo cuando mi dueño está en casa. Es un gran pinche. Todos los chefs necesitamos pinches de cocina. Yo mando y el hace lo que le digo, así evito ensuciarme las patitas. Cuando hago un comunicado de cocina, ayudo un poco más cuando hacemos una foto. Pero hoy me tocará hacerlo todo yo, espero no ensuciarme, con el frio que hace estos días no me apetece bañarme. Ya de por sí no me gusta nada, menos con frio.

Bueno, creo recordar que tengo una masa de pizza de las que hice hace tiempo en el congelador. Pues ya tengo resuelta la comida. Pizza.

Un poco de harina en el mármol… y ale, a darle al rodillo. Jopé, que cansado que es esto.

Una vez estirada la paso a la bandeja del horno. Y ahora viene el dilema, ¿de que hago la pizza? No tengo ni idea de lo que tengo en la nevera.

Menos mal, tenía  tomate, queso rallado, bacón y rulo de cabra. Suficiente para hacer una pizza sencilla pero riquisísima.

Y ale, al horno y en unos minutos lista.

Mmmm. Qué buena pinta tiene. ¿Os apetece un cacho? Pues no os voy a dar, es mía.

Jejeje.

Y como soy un osito goloso, mientras tenia la pizza en el horno me he preparado un postre muy acorde con la pizza, y muy riquisísimo. Pero eso ya es otro comunicado. Mañana os cuento que he comido de postre y naturalmente como prepararlo hasta el último detalle.

Un hociquito.

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