Hola. Al final nos acabamos riendo todos con la inocentada de ayer.
Pero me gustaría retomar el tema de Nochebuena. Como os conté aquí en casa hicimos cagar el “Tió de Nadal”, pero luego fuimos a casa de un familiar, para pasar una velada muy agradable. Me hizo mucha gracia, que solo entrar en el jardín, había unos arbolitos adornados con luces, muy navideño, me gustaron mucho y ya me conocéis… ¡FOTO! Para que los veáis también.
Y dentro, me esperaba una sorpresa, había un “Tió de Nadal”, el mismo del año pasado que había vuelto. Como ya venía entrenado de casa, he ido corriendo a la cocina, he cogido unas piezas de fruta para dárselas. Si no le doy comida, quizá no me dará ningún regalo, pues a este no lo he cuidado nada. A ver si hay suerte.
Mientras esperábamos que llegara la gente, ya me conocéis, cotilleé un poco por allí, y descubrí las bandejas con los aperitivos de la cena, que buena pinta, se nota que saben cocinar muy bien y muy riquisísimos que estaban.
La mesa del comedor, aún vacía de comida, había unos regalitos sorpresa y por la tele un señor haciendo un discurso un poco rollo.
Bueno, cuando ya estuvimos todos, hicimos cagar el Tió, y hubo regalitos para todos. Menos mal que le di un poco de comer, porque también hubo uno para mí.
El resto de la velada fue genial, mucha comida, demasiada incluso, charlas interesantes y entre una cosa y la otra se hizo muy tarde. Pero aún hubo una sorpresa más, al llegar a casa, técnicamente ya era Navidad, y Papa Noel ya había pasado por allí. Menos mal que había dejado un calcetín cerca del Árbol de Navidad, me dejo 2 regalitos.
Un adorno en forma de Papa Noel para el Árbol y otro Papa Noel con huevos Kinder en su interior. ¡Yupi! Pero estaba tan cansadito que me fui a dormir enseguida. Eso sí, cuando me desperté por la mañana, lo primero que hice fue colgar el adorno en el árbol y comer un huevo Kinder. Jejeje.
Y dentro, me esperaba una sorpresa, había un “Tió de Nadal”, el mismo del año pasado que había vuelto. Como ya venía entrenado de casa, he ido corriendo a la cocina, he cogido unas piezas de fruta para dárselas. Si no le doy comida, quizá no me dará ningún regalo, pues a este no lo he cuidado nada. A ver si hay suerte.
Mientras esperábamos que llegara la gente, ya me conocéis, cotilleé un poco por allí, y descubrí las bandejas con los aperitivos de la cena, que buena pinta, se nota que saben cocinar muy bien y muy riquisísimos que estaban.
La mesa del comedor, aún vacía de comida, había unos regalitos sorpresa y por la tele un señor haciendo un discurso un poco rollo.
Bueno, cuando ya estuvimos todos, hicimos cagar el Tió, y hubo regalitos para todos. Menos mal que le di un poco de comer, porque también hubo uno para mí.
El resto de la velada fue genial, mucha comida, demasiada incluso, charlas interesantes y entre una cosa y la otra se hizo muy tarde. Pero aún hubo una sorpresa más, al llegar a casa, técnicamente ya era Navidad, y Papa Noel ya había pasado por allí. Menos mal que había dejado un calcetín cerca del Árbol de Navidad, me dejo 2 regalitos.
Un adorno en forma de Papa Noel para el Árbol y otro Papa Noel con huevos Kinder en su interior. ¡Yupi! Pero estaba tan cansadito que me fui a dormir enseguida. Eso sí, cuando me desperté por la mañana, lo primero que hice fue colgar el adorno en el árbol y comer un huevo Kinder. Jejeje.
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