VARITA MÁGICA DE OLLIVANDER'S

Hola. Ayer decidí salir y empezar a hacer algunas de las compras Navideñas, justo durante las fiestas mi dueño celebra su cumpleaños y tengo que empezar a inspirarme de que puedo regalarle, es tan difícil regalarle cosas…

Bueno, en mi paseo de compras, pasé por el Callejón Diagón y me quedé embobado viendo el escaparate de la tienda Ollivander’s. Había muchas y variadas varitas mágicas. Demasiado bonitas, ya me imaginaba blandiendo una varita y realizando hechizos y conjuros. Sin dudarlo más entré, quien sabe, quizá hubiera una varita mágica destinada a mí.

Después de probar muchas varitas, hubo una que parecía que era afín conmigo. Era una varita de sauce, flexible con incrustaciones doradas. Era preciosa. Le dije al señor dependiente que me iba a quedar esa. “Excelente elección” – me dijo. Pero…. cuando me dijo el precio, se me pusieron las orejas de punta. Era demasiada cara, no podía permitírmela. Le dije que ya volvería y salí con las orejitas gachas de la tienda de varitas.

Llegué a casa. Mi dueño ya había llegado y me tenía un flaM preparado, era mi merienda. Pero estaba tan triste, que hasta yo mismo me sorprendí diciendo “No gracias, ahora no tengo hambre”. Mi dueño se quedó sorprendido y me preguntó “¿Qué te ha pasado Travis? Le conté la historia de la varita. Él como siempre que quiere darme ánimos sonrió y me dijo. ¿solo es eso? Venga ven, yo tengo la solución para eso. Abrió un armario, al que no puedo llegar normalmente y sacó una cajita. La abrió… y en su interior había una varita mágica con incrustaciones doradas, muy parecida a la que vi en la tienda.

-          Es para ti – me dijo.

¡Yupi! Una varita mágica para mí. Jejeje. ¡Qué ilusión!, pero… tuve que decir… ¡no gracias! Estas varitas son muy caras y no la puedo aceptar.

Pero Travis, esta varita no es cara. La he fabricado yo.

¿Cómo? – me quedé sorprendido. Mi dueño sabía fabricar varitas ¿sería un poderoso mago? Y yo sin siquiera sospecharlo.

Me explicó cómo se construían las varitas, y la verdad es muy fácil.

Al final el día terminó con final feliz. Con un flaM para merendar y una varita mágica.

Así que preparaos… en el próximo comunicado os explicaré como construir esta varita mágica. Os sorprenderéis de lo fácil que es.

Un hociquito, y que tengáis un muy buen fin de semana.

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