Mis patucos no están secos. ¡Qué lata! Los puse tendidos en la esquinita del balcón porque pasa más aire y en teoría se deberían haber secado antes. Pero por la noche llovió y como estaban en la esquina, se volvieron a mojar. Hoy parece que hace solecito, haber si por la tarde ya están secos.
Mientras, quería cambiar la fuente de agua a la entrada de casa. Normalmente siempre ha estado en la sala de estar, pero para mí era un coñazo. Como estaba encima de una mesa, yo desde abajo no la podía ver y solo podía oír el agua. Si la quería ver, tenía que encaramarme, y hacerlo cada vez es un rollo. Así que hoy, con ayuda de los otros peluches la hemos bajado y la hemos colocado más a nivel Travis. Ahora si que la puedo disfrutar. Aunque solo un rato, si estoy demasiado rato escuchando la cascada de agua, me entra ganas de hacer pipí.
Luego he dado mi habitual vuelta por la casa, a ver que podía cotillear. Y detrás de una puerta, he encontrado algo que aún no había visto nunca. Algo de madera… mmmm… sospechoso.
Ahora aquí, ya veo lo que es, es como un maletín, pero hecho de madera, como una caja pero con asa, y parece muy antigua.
Ahora que me fijo mejor, creo que ya se lo que es, antiguamente cuando los niños iban al colegio no tenían las bolsas que tienen ahora, y llevaban los libros y libretas en maletitas como esta. ¡Qué chula! Debe ser de alguno de los padres de mi dueño.
Pero… ¿Qué habría dentro? Abro la maletita y … ¡OHHH!
Son retales de ropa, ¡más cosas para disfrazarme! Ep. no. Solo son cremalleras, hombreras y lazos. Vaya, yo que ya me hacía ilusiones que fueran retales, ya sabéis que me encanta confeccionar disfraces con los retales. Pero ahora ya me había hecho a la idea. Vamos a ver las cosas que hay, quizá aun tenga suerte y pueda hacer algo. A ver…
Estas hombreras me están dando una idea, justo este fin de semana estuve viendo la película “La brújula dorada” y salían ositos acorazados. Como molaban, eran como yo, fuertes, valientes… la diferencia estriba en que yo no tengo coraza, pero ahora con el contenido de esta caja me convertiré en “TRAVIS, EL OSITO ACORAZADO”. Hociquitos
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