ME VOY A LA MONTAÑA. PARTE 4. ENCUENTRO SETAS

Os sigo contando mi paseo por la montaña del fin de semana pasado. Y digo paseo porqué al final fue eso. La idea inicial era ir a pasear pero ir mirando de encontrar setas comestibles, rovellons, brunets, bolets de bou, etc… Las setas tienen tantos nombres según el sitio que he puesto los nombres que yo uso. Una misma seta puede tener hasta seis nombres distintos, jejeje, y es un lio.

Estuvimos buscando, pero nada, setas como podéis ver en las fotos si encontramos, y además eran muy chulas, pero no eran comestibles e incluso alguna venenosa.

Era una pena. A mí me gusta mucho ir a buscar setas, en mi aldea natal, como está en medio de un gran bosque, hay cantidad de setas y ya de cachorrines aprendíamos a buscarlas y a reconocerlas. Mi papi siempre me decía, “Travis, si encuentras una seta y no la conoces, no te la comas nunca. Pues puede ser venenosa. Antes de hacerlo, pregunta a quien pueda saberlo. Y si nadie lo sabe, la tiras”. En este aspecto, siempre le he hecho caso a mi padre. Era un oso muy sabio.

En estas que recordaba las palabras de mi padre, cuando veo unas setas enormes, casi casi, talla Travis, jijiji. Eran marrones  y tenían muy buena pinta. No la conocía, pero por si acaso las puse en la cesta, mi dueño no estaba en ese momento por allí, así que al volvernos a encontrar se las enseñe, esperanzado de que me dijera que eran comestibles. Pero él, tampoco lo vio claro, le recordaba a alguna parecida, pero no estaba seguro. Así que ante la duda, la tiramos. Era una pena. Era muy chula.

Seguimos encontrando setas, pero todas no comestibles. Que rollo.

Al final pusimos rumbo hacía el coche y justo al lado donde lo habíamos aparcado, encontré dos setas muy chiquitinas, y encima eran conocidas. 

Aquí las llamamos “Bolets de bou”, la traducción literal “Setas de buey”. Pero como os decía antes, tiene muchos otros nombres, jejeje, su nombre científico, Suillus collinitus, y los vulgares, bolet groc, esclata butzes, esclata sabates, pixacà,  Kuntze, pinetell, molleric… ¿sigo? Jejeje. Ya os avisé que tenían muchos nombres las setas.

Pues nada aquí acabo nuestro paseo y cacería de setas.

O eso creía yo.

Un hociquito chiquitito (como las setas)

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