TARTA DE SANT JORDI


Como os había prometido ayer, hoy toca un comunicado pastelero.
Como el próximo lunes es San Jordi quería preparar un postre especial para ese día. Aquí se asocia ese día a la festividad de Cataluña, pues Sant Jordi (San Jorge) es el patrón. Así que ni corto ni perezoso me he puesto patitas a la obra. Me adelanto unos día, pero de esta forma si queréis hacerlo tenéis tiempo para ello y además mi dueño ya me ha pedido que si sale bien, el domingo prepare otra.
Necesitaremos…

Fresas
Manzanas
Masa de hojaldre
Crema pastelera


Primero he preparado crema pastelera, no lo he detallado porque ya la he hecho otras veces, de todas formas si tenéis problemas en este punto podéis consultarme.
Pelamos las manzanas y las cortamos en cachitos pequeños, igualmente las fresas.
Extendemos la masa de hojaldre sobre el papel de horno.
Con el cuchillo delimitamos un borde de 1 cm, pero cuidado, no cortéis la masa, solo es un suave corte sin perforarla. De esta forma, luego cuando esté en el horno, subirá sin problema el borde.
Esparcimos la crema pastelera sobre la masa, evitando poner sobre este borde que hemos delimitado.
Luego ponemos los cachitos de fruta. Como es el postre para el día de San Jordi, como os decía antes, he intercalado las manzanas y las fresas como si fuera la bandera de Cataluña. Pero ya sabéis, la técnica es la misma para cualquier fruta, así que imaginación al poder y haced las combinaciones que os parezcan, con vuestras frutas favoritas.
Una vez listo, al horno, que previamente habremos precalentado a 200 grados. Y mantenemos la tarta unos 20 minutos. De todas formas vigilad, cuando los bordes estén  doraditos ya la podéis sacar.
Solo así ya estaría buena, ahora podéis usar almíbar para pintarla y  darle más brillo, o una mezcla de gelatina, agua y azúcar, para crear una capa neutra sobre ella. Lo que queráis.
Os aseguro, que me ha salido una tarta para rechupetearse las patitas. Ya se lo que me toca el domingo, preparar otra. Jejeje.
Un hociquito. Buen fin de semana.

El Truquitravis
La manzana es una fruta que se oxida con mucha facilidad y adquiere un color marrón que puede afear la presentación de la tarta. Para evitarlo, cuando cortéis en trocitos la manzana, poned esos trozos en un bol que previamente lo hemos llenado con agua y el zumo de un limón. El limón evitará que se oxide. Cuando necesitemos estos trozos de manzana, los ponemos en un colador y les pasamos un agua para limpiarlas.
Y hoy sin que sirva de precedentes…

El Truquitravis 2
Si antes de poner la tarta en el horno, ponéis un trocito chiquitín de mantequilla sobre las manzanas, conseguiréis un acabado superior. La manzana quedará más dorada.

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